• Julian es un niño de doce años que vive en un pueblo de la cuenca del Ruhr, en la década de los sesenta. El trabajo en las minas de carbón ha ido perjudicando la salud de su padre, y su madre, abrumada por el cansancio y una vida distinta a la que esperaba, no es especialmente cariñosa con él. Los únicos apoyos con los que cuenta Julian son su hermana pequeña, Sophie, y Marusha, una vecina adolescente en quien verá la primera llamada del sexo. Cuando su madre se va de vacaciones con su hermana y lo deja unas semanas de verano solo con su padre, Julian empieza a ser consciente del fin de su infancia. A través de una galería de personajes pintorescos y entrañables, Rothmann pone palabras a ese periodo ambiguo de la vida en el que la niñez se desvanece pero aún no se puede ver al adulto en el que nos convertiremos. Luz de juventud es una de las obras que ha encumbrado a Ralf Rothmann dentro de la literatura alemana actual. «Rothmann despliega en "Luz de juventud" una soberbia historia en la que Julián, un niño de doce años, tantea la adultez entre la incomprensión y el asombro, entre la estupefacción y los códigos de lenguaje que aún le resultan ajenos. Una prosa a veces elíptica, que sugiere y evoca más que describe, en otras de un realismo casi científico, como en las descripciones del trabajo a centenares de metros bajo tierra en los filones de carbón, envuelve el relato a dos voces.»Iñigo Urrutia (El Diario Vasco) «El escritor alemán huye de los pigmentos trágicos para dejar que la realidad cotidiana imponga el ritmo de la narración, mostrando más que implicando al lector en una historia que de antemano sabe que le es ajena. Sin embargo es muy difícil no sentirse concernido por la voz del protagonista. (…) "Luz de juventud" se convierte en una novela descomunal que ofrece a partes iguales esperanza y desencanto en un mundo desconocido.»Antonio J. Ubero (La Opinión de Murcia) «Su escritura se ajusta a lo que quiere contar y lo hace, además, con profusión de detalles. Una de sus virtudes es la "mot juste" de Flaubert, exacta y precisa. Otra, la autenticidad. (…) Leer a Rothmann es hacerse un favor.»Luis M. Alonso (La Nueva España)