• 3a edición. Prólogo de Leopoldo Eijo Garay. Encuadernado con orientación errónea (cubierta e interior), por lo demás en buen estado. / Manuel García Morente (Arjonilla, 22 de abril de 1886-Madrid, 7 de diciembre de 1942) fue un sacerdote, filósofo, teólogo y traductor español. Asimismo fue alumno de la Institución Libre de Enseñanza y colaborador en su cuadro de profesores. Convertido al catolicismo, fue ordenado presbítero en 1940. Fue traductor de las principales obras de Inmanuel Kant. Se interesó por el kantismo y el bergsonismo — de ahí su obras La filosofía de Bergson (1917) y La filosofía de Kant (1917). Estudió la filosofía del momento alemana. En 1930, García Morente fue nombrado subsecretario de Educación Pública y, en 1932, fue nombrado decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central de Madrid. Allí se convirtió en el artífice de la nueva Facultad en los terrenos de la Ciudad Universitaria. En 1933 organizó y participó, junto al arqueólogo Antonio García y Bellido, en la expedición que, a bordo del Ciudad de Cádiz, recorrió durante cuarenta y ocho días los principales yacimientos arqueológicos del Mediterráneo y es conocida como crucero universitario por el Mediterráneo de 1933. Tras el inicio de la Guerra Civil, en 1936, destituido de sus cargos en la Universidad Central, García Morente se trasladó a París. En esta ciudad, en la madrugada del 29 al 30 de abril de 1937, después de escuchar por la radio un fragmento del oratorio La infancia de Cristo de Hector Berlioz, experimentó una profunda vivencia de transformación interior, a la que se refirió como «el hecho extraordinario»; esa experiencia desencadenaría su conversión al catolicismo.? En junio de 1938 volvió a España para iniciar su formación como seminarista en Pontevedra y, siendo admitido en el Seminario de Madrid durante 1939, recibir el orden sacerdotal de presbítero en 1940. Fue miembro de número de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Los últimos años de su vida, ya asimilada la filosofía tomista (entre sus escritos inéditos se encuentra la traducción de las cinco primeras cuestiones de la Suma teológica), los dedicó a completar sus estudios sobre la Filosofía de la historia de España (1942), Ideas para una filosofía de la historia de España, en donde plantea la existencia de una idea eterna de España en torno a la noción de hispanidad, así como al desarrollo de las metafísicas especiales larvadas en su diferenciación de los distintos ámbitos de la realidad: físico, psíquico, ideal, axiológico, histórico y sobrenatural. En julio de 1937 marchó a Argentina, donde fue profesor en la Universidad Nacional de Tucumán.