• Quince ilustradores y pintores españoles se subieron a El Transcantábrico para dibujar un viaje en el tren inspirado en el libro homónimo del escritor Juan Pedro Aparicio. El resultado de este crucero sobre raíles, realizado por un tramo de la España Verde entre Bilbao y Oviedo, refleja la realidad cotidiana de un proyecto que, veinticinco años después de su inauguración, ha logrado codearse con los mejores ferrocarriles turísticos del mundo. Las limitaciones de la vía estrecha son superadas ampliamente gracias a la calidad de su servicio a bordo, la comodidad de sus camarotes y la belleza de los paisajes que atraviesa, reptando entre valles y montañas en busca del mar que baña la costa de la Cornisa Cantábrica. Los 220 metros de longitud de El Transcantábrico, con sus más de cuatrocientas toneladas de peso, adentran al viajero en un territorio donde se alzan iglesias románicas y góticas, cuevas de arte prehistórico únicas en el mundo y siglos de historia pegados a las piedras que aún guardan los ecos del paso de las legiones romanas. Dibujando El Transcantábrico es un homenaje gráfico al propio tren, a los que lo hacen posible y a la aventura de viajar por un tramo del Noroeste español donde sus habitantes han entendido la necesidad de cimentar su futuro en una poderosa tradición cultural que aún se refleja en su gastronomía, su artesanía, sus inquietudes? Observar esa realidad a través de las imágenes de un puñado de los mejores artistas gráficos españoles es algo tan apasionante como el propio viaje.