El Grifilm

Juan Antonio de Riaño: benefactor de Guanajuato y defensor de la Alhóndiga de Granaditas

18,00 €

Autor: Lucina Toulet Abasolo; Carlos de Riaño Lozano; José Emilio Galindo García Gutiérrez

Editorial Pagina 4; Navegantes de la Comunicación Gráfica

Edición de 500 ejempares. (México). / Juan Antonio de Riaño y Bárcena (Liérganes, Cantabria, España, 16 de mayo de 1757–Guanajuato, Nueva España, 28 de septiembre de 1810). La Alhóndiga de Granaditas es el edificio histórico más importante de Guanajuato y uno de los primeros de la República Mexicana, pues el hecho que el destino escribió, en el nació México. La palabra alhóndiga proviene del árabe, y quiere decir almacén de alimentos. De todas las alhóndigas que se construyeron en todo el continente, ninguna tiene la belleza de la de Granaditas, nombre dado porque se construyó donde fuera un huerto de granados. Poco después de la llegada (en 1792), el Intendente de Guanajuato don Juan Antonio de Riaño y Bárcena, pidió prestados 20 000 pesos del Ayuntamiento para establecer un pósito: un almacén público de maíz que podía ser vendido a precios moderados para contrarrestar cualquier súbita alza de precios. Para alojar tanto el almacén del mercado municipal de granos, obtuvo permiso del virrey para construir la Alhóndiga. La obra se comenzó a construir en 1797 y se terminó en el año de 1809, con un costo total de 218 306 pesos. El maestro mayor de arquitectura que diseñó el edificio fue José del Mazo y Avilés, pero fueron Francisco Ortiz y Castro y Juan de Dios Pérez, ambos descritos como “maestros de arquitectura” quienes dirigieron la obra. El resultado fue un edificio monumental construido en un austero estilo neoclásico y cuyas altas paredes de piedra le dan un aspecto de fortaleza, pero agraciado con un patio porticado más propio para una misión que para un granero.